¿Una Noche por Trabajo? [Libre]

No sabia como, pero Takumi habia llegado repentinamente a un prostibulo, solo por haber salvado a un humano que estaba en aprietos y como recompensa lo habia obligado a ver a "algunas preciosuras". Entro con las manos en los bolsillos y miro a las jovenes que mostraban casi todo su cuerpo para satisfacer las necesidades de algunos ancianos morbosos, busco al humano que lo habia traido a aquel lugar pero este habia desaparecido dejandolo solo, suspiro y se acerco hacia una peliazul que parecia llamar la atencion de los hombres , mientras que Takumi solo la miraba, jamas habia sido un hombre pervertido y no lo seria nunca, incluso le desagradaba el hecho de que mujeres se vendieran de tal forma. Miro a las otras jovenes que bailaban y volvio a mirar a la peliazul, a pesar de todo era muy atractiva y el tenia mucho tiempo libre. Saco unos billetes del bolsillo y aparto a unos hombres que trataban de agarrar a la peliazul.

- Hey... aqui

Llamo a la joven mostrando los billetes en su mano, los hombres de su alrededor se revisaban los bolsillos y se lamentaban de haber gastado todo el dinero en las otras jovenes, otros lo miraban con furia y celosos de que el tuviese dinero.

Se dejo llevar por la peliazul llamada Kaiko hasta un sillon escuchando las provocadoras palabras de la joven, Takumi solo se dejaba tocar mientras desviaba su vista para contemplar a las otras mujeres que terminaban rapida y eficazmente su trabajo para volver a la pista de baile y conseguir mas dinero. Volvio su vista hacia la peliazul y se quedo admirandola ¿Porque no se habia ido de ese lugar aun? las mejillas de la joven poseian un leve rubor y sus manos todavia eran inexpertas para este tipo de cosas, Takumi llevo sus manos a la cadera de la peliazul para recorrer con lentitud su espalda hasta llegar hasta su rostro, acariciando una de sus mejillas con el pulgar.

- ¿Es la primera vez que estas en este lugar, pequeña vampiresa?

Desde que entro al prostibulo habia sentido la presencia de un vampiro, y ahora podia comprobar que tenia a una traviesa vampira encima de el, aunque aun no preparada para el trabajo que se habia ofrecido en hacer. Dejo de acariciar su rostro para recorrer el borde de sus labios con el dedo, su otra mano bajo hasta su pierna para acariciarla con lentitud sin quitar la vista de los ojos azulados de la joven.

Etto.. lo se, soy una estúpida, no debí llegar a parar a este lugar, solo por el maldito dinero... pero... lo necesito, y siquiera con lo que tengo me alcanza para una pequeña habitación en los barrios bajos... pero no importa cierto- dije con una sonrisa- ya estoy en este lugar, y seguiré adelante...

De repente sin siquiera saber que hacia lo tome por el cuello y le di un beso corto y comencé a acariciarlo.

A propósito, no me dijiste tu nombre

Todo era por conseguir un poco de dinero, la peliazul se encontraba en vergonzosas condiciones por que no tenia lugar donde vivir y necesitaba trabajo con urgencia, Takumi hizo una mueca de disgusto, era dificil encontrar un trabajo decente y suponia que era aun mas dificil para una mujer. Dejo de acariciar su pierna y bajo su otra mano que acariciaba su rostro para admirar este mismo, sin errores, palido, perfecto. Sin darse cuenta recibio un inesperado beso de parte de la joven, a pesar de que ella estaba ahi para cumplir todas sus fantasias, no creia que se atreviera a hacer tales cosas.

- Takumi..

Susurro su nombre acercandose a los labios de la peliazul para besarlos con lentitud, antes de terminar el beso mordio su labio inferior para estirarlo y lo solto para volver a apoyarse en el sillon.

- Dime... ¿Estas segura que quieres hacer esto? No es necesario.. no te quiero obligar..

No sabia muy bien porque le preguntaba tal cosa a la joven, no era normal que el actuara asi, pero se sentia algo incomodo aprovechandose de alguien por dinero.